lunes, 24 de septiembre de 2012

Tarde de Haikus

 Acompañando a Cintia a comprar unos libros para una biblioteca que inauguraban, encontré esta joyita. Siempre me cautivó la belleza de lo simple que tiene el haiku. Pocas palabras que dicen mucho.




sábado, 15 de septiembre de 2012

"La vida corre y no espera al que se queda..." ♫


Yo también tengo miedo y no está mal tener miedo. El miedo es útil cuando uno puede pararse sobre sus dos pies y ver el camino que esta adelante, pero después,  sigue caminando.
El miedo que paraliza no es bueno. El miedo que nos hace replegar no sirve. Sobre todo si hay deseos  de construir.

Siempre fui una luchadora de la vida. Algunas situaciones no me resultaron sencillas. Siempre le puse el pecho a las balas porque no concibo otra manera de vivir. Lucho por lo que creo que vale y voy al frente, con toda la pasión, la fuerza, y lo poco de sabiduría que me dieron los años. Pero sobre todo con la convicción de darlo todo hasta el final.

El tiempo es poco. Es una ilusión creer que tenemos la vida por delante. La vida es una, hasta donde sabemos,  hay que vivirla y disfrutarla.

Después es tarde.

martes, 11 de septiembre de 2012

Sucesos Gatunos

Ya cumplieron 7 meses. Están grandes, hermosos, juguetones, traviesos, mimosos. A Dashi, que la llamábamos "gorda", ahora esta flaca. Sushi se puso morrudo, a veces cuesta alzarlo!
El 1 de septiembre los llevamos a la veterinaria para castrarlos. Se bancaron el viaje en bondi, adentro de las mochilas. Ya cuando los llevamos a vacunar al Pasteur, se portaron muy bien, se acomodaron en las mochi, y fueron tranquilos.
Los dejamos sedados y fuimos a desayunar con Martín.
A los 40 minutos volvimos. Nos entregaron a los dos, todavía semi dormidos. Dashi pelada y con su sutura a la vista. Los llevamos en taxi hasta casa y los pusimos en su cuchita. Sushi enseguida reaccionó : quería moverse y deambular. La gorda tardó un poco más. Fue difícil mantenerlos quietos. Ese finde me quedé en casa para cuidarlos todo el tiempo. Temía que Dashi se quisiera sacar el punto. Por otro lado, Sushi, que estaba mejorcito, se le tiraba encima para jugar y yo los separaba. Esa noche, reviví mis noches de insomnio cuando Martín era bebé. A cada rato abría los ojos para verlos. Me preocupaba el lunes. Yo tenia que ir a trabajar y dejarlos solos todo el día. Finalmente estuvieron bien. Ya están como locos otra vez. Dashi se tomó la costumbre de escaparse cada vez que abro la puerta del departamento. Se va a investigar el mundo.

Cada día que pasa, pienso en lo bien que hice de traer a los dos gatitos. Nos alegran la vida, nos llenan de amor y nosotros a ellos. Al verlos jugar, nos acordamos de ♥Kimba♥, sobre todo Martín, que lo extraña muchísimo y a veces se le cae alguna lágrima cuando lo nombra...



Kimba♥

jueves, 6 de septiembre de 2012

Ohmmmmrigami







Bolsita de regalo
Mandala
Angel fish
Pez tropical (no saben como busqué este pez! este diagrama lo envío por mail al que lo quiera)
Trébol de cuatro hojas (que puede convertirse en flor si le agregamos el centro)

Hoy ando con pocas palabras. En otro post les cuento las desventuras de Sushi & Dashi en su recuperación de la cirugía de esterilización.

Ahora...¡ A plegar!